Es difícil elegir 10 platos típicos de España. La riqueza de nuestra gastronomía es innegable. Vayas donde vayas se come muy bien y los ingredientes utilizados son de lo más variado y saludables. Entre todos los platos típicos de España que podemos y debemos probar en nuestros viajes, hemos hecho una selección de lo más suculenta. Aquí va, buen provecho para todos.
10 platos típicos de España para chuparse los dedos
1. Paella
Sin duda el más famoso de todos los platos típicos para comer en España y conocido en todo el mundo. Eso sí, se ha hecho tan variable y diverso que en muchos lugares lo que comemos es «arroz con cosas» como dicen los valencianos. Los ingredientes de la paella valenciana tradicional son el arroz, el pollo de corral, el conejo, la judía verde plana, la zanahoria, el aceite de oliva, el garrafón y a veces también los caracoles y la alcachofa. Lo suyo es hacerla en una gran paella y sobre fuego prendido en ramas de naranjo. Si estamos en casa esto no será posible pero si cumplimos con esos ingredientes la estaremos haciendo a la manera auténtica y tradicional.
2. Huevos rotos
¡Ay esos huevos rotos, qué ricos están! Otro de los platos típicos de España sencillo de ingredientes y de elaboración, así como resultones y sabrosos. Si tenemos niños pequeños a los que les cueste comer seguro que con este plato triunfamos. Y es que reúne algunos de los ingredientes más apetecidos por grandes y pequeños: los huevos fritos (que luego se rompen) y las patatas. Luego, podemos acompañarlos de jamón y ya el resultado será realmente divino (aunque todo depende de los gustos de cada uno).
3. Salmorejo
Este plato típico de la cocina andaluza es ideal para refrescarse en los días de calor. Además es más suave que el gazpacho aunque no pierde en cuanto a sabor. El más tradicional procede de Córdoba, donde el arte y la gastronomía van de la mano en cualquier visita.
Los ingredientes del salmorejo son tan sencillos y habituales en cualquier hogar que no hay excusa para intentar hacerlo: tomate, pan de hogaza, aceite de oliva virgen extra, ajo y sal. Con este plato seguro que acertaremos durante el verano: sano y fresco.
4. Migas
He aquí otro de los platos típicos de España que más variantes acoge. Su origen está en el campo y más concretamente en el pastoreo; es un plato rico en proteína y propio de la cocina castellana y de interior. Los ingredientes son aquellos de los que disponía el pastor cuando marchaba con las ovejas por los campos de Castilla; requería pocas complicaciones, proteínas y facilidad de cocinado. Pan, chorizo, sal, panceta, agua y ajo son los básicos, a ellos a veces se añade según la zona huevo, uvas etc.
En los restaurantes de Albacete más tradicionales se comen unas exquisitas migas «ruleras» que suelen llevar uvas en una deliciosa mezcla de dulce y salado. También en los restaurantes de Guadalajara se pueden comer unas fabulosas migas del pastor.
5. Fabada
No se puede viajar a Asturias y no comer fabada. Bien sea en los restaurantes de Avilés, en las casas de comida de los pueblos de interior (y en los costeros) o en las variadas sidrerías en Oviedo, la fabada es un imprescindible gastronómico. Fabes, chorizo, panceta, morcilla, ajo, cebolla, laurel y sal en una composición gastronómica divina; ¿la mejor época del año para tomarla? pues, como sucede con muchos platos de nuestra gastronomía, quizás sea más favorable la temporada de frío pero, ¿quién le dice que no a una buena fabada?
6. Pulpo «a feira»
Este es otro «platazo» de la gastronomía española. Es imprescindible tomar un buen pulpo en todo viaje a Galicia que se precie, aunque cada vez más se hace fuera de la autonomía gallega. Sin duda no es un plato sencillo de hacer y hay que tener cuidado en que no se pase y quede gomoso, pero cuando está bien hecho es una auténtica maravilla.
7. Cocido madrileño
Junto con la fabada y las lentejas, forma la tríada de legumbres hispanas. Sin duda, este plato contundente y más «invernal» que otros, salvó de la malnutrición a muchas generaciones de madrileños (y de otras zonas de España). Admite tantas variaciones como cocineros y si uno le ponen pollo, otros pondrán gallina; mientras que algunos usarán tocino, otros panceta o papada. Sea como sea, el resultado es un plato proteico y sabroso como pocos.
8. Papas «arrugás»
Si viajamos a Canarias allí no podemos de dejar de probar otro de los platos típicos de España más famosos. Papas canarias, sal gorda, agua y mojo (picón o verde) son los ingredientes de este plato imprescindible de nuestra rica gastronomía. Si no nos atrevemos a hacerlas ya tenemos la excusa perfecta para viajar hasta las Islas Afortunadas y comerlas in situ.
9. Pescaíto frito
¿A quién no le apetece un buen plato de «pescaíto» frito cuando viajamos a Andalucía? Ese crujiente que a ellos queda como a nadie, esa variedad en pescados frescos y ese sabor del aceite que le da un toque único e incomparable. Si viajamos al sur no podremos prescindir de un plato sano, sabroso y con muchísimo sabor. Eso sí, siempre podremos probar además la riqueza de la gastronomía local si comemos en Antequera, Ronda o Cádiz; casi cada localidad tiene sus variantes sobre los platos tradicionales de la cocina andaluza.
10.Diferentes guisos de carne
Terminamos nuestro recorrido por los platos típicos de España con una generalización. Y es que las tierras del interior, Extremadura, Castilla, Aragón, La Rioja etc. son ricas en carnes de sabor y de pasto. Así el cordero manchego, el cabrito cochifrito, el lechazo al horno o el cochinillo son sólo algunas de las muchas posibilidades de guisar las carnes que se producen en el interior. Estos guisos son contundentes y muy sabrosos y enlazan perfectamente con la cocina tradicional que tanto nos gusta probar cuando viajamos.