Francia es sin duda uno de los destinos culturales más deseados de Europa. Famoso por sus bellas ciudades, ofrece destinos para todos los gustos. Culturales, de playa o de naturaleza. Además, la comida francesa es una razón más por la que viajar al país vecino.
Es un país perfecto para viajar en pareja, pues es romántico como pocos, con preciosos castillos para dormir en Francia, granjas para disfrutar de la tranquilidad y modernos hoteles con todas las comodidades.
En este artículo os vamos a contar cuales son esos 10 platos de la gastronomía francesa que merece la pena probar al menos una vez. Ya nos contaréis de todos ellos cual es vuestro preferido.
Comida francesa: 10 platos típicos
De entre todos los platos de comida francesa hemos seleccionado los diez que nos parecen más sabrosos y que se encuentran entre los más típicos de la gastronomía francesa. No son los únicos, pero sin duda se encuentran entre los más sabrosos, y que además, ahora que viene el frío son sin duda perfectos para disfrutar de la gastronomía de otoño.
Bouillabaisse
Vamos a comenzar nuestra lista de comida francesa por una sopa típica de Provenza. La bouillabaisse se prepara con pescado de roca y marisco. En la receta se incluyen cigalas, cangrejos, congrio o rape. Cada cocinero le da su propio toque, y por supuesto, lo mejor es siempre elegir productos de temporada. Una vez preparada esta famosa sopa de la gastronomía francesa, se añade un chorrito de aceite, si es de oliva, mucho mejor. Y para acompañar, pan tostado. Un plato perfecto para tomar bien caliente cuando llega el frío.
Cassoulet
El mejor lugar para degustar este guiso cuya base son las judías es el sur de Francia, siendo ciudades como Carcassone o Toulouse lugares perfectos para disfrutar de este plato de comida francesa. Es un guiso «potente», no apto para viajeros a dieta. Además de las judías, en el cassoulet están presentes la butifarra, el tocino y la carne de pato. El toque especial de este plato es la costra dorada que se consigue al meterlo al horno tras acabar su cocción.
Boeuf Bourgignon
La carne de buey y el vino son los ingredientes de este plato mundialmente conocido de la cocina francesa. Ambos ingredientes son típicos de Borgoña, la región de la que es típico el Boeuf Bourgignon. En el pasado fue un plato muy popular entre los campesinos en sus fiestas donde comían este plato de la gastronomía con tostadas frotadas con ajo, siendo la comida dominical por excelencia.
Galettes
Es muy probable que hayáis probado los típicos crepes franceses. ¿Pero sabéis que en Bretaña se realizan con trigo sarraceno? El aspecto exterior cambiar bastante, ya que el color de la masa es muy diferente. Además las galettes son saladas y se suelen rellenar con queso, jamón o champiñones, con un solo ingrediente o varios de ellos. La antigua capital de Bretaña, Nantes, es un bueno lugar para disfrutar de este sencillo y sabroso plato de la comida francesa.
Ratatouille
Este guiso tradicional francés es uno de los platos más sanos del país vecino. Su base son las verduras. Pimientos, berenjenas, tomates, calabacín. El truco para preparar un ratatouille perfecto es cocinar el plato cociendo cada verdura el tiempo necesario para que ninguna quede dura ni se pase. Para darle un sabor especial, se añaden diferentes hierbas provenzales.
La soupe à l’oignons
Si te gusta la sopa, no puedes dejar de probar la sopa de cebolla, un plato típico de la gastronomía francesa cuya receta se remonta nada menos que a tiempo de la Revolución Francesa. Entonces solamente había ingredientes muy básicos con los que cocinar, de modo que con pan y cebolla se podía preparar una sopa. Con el tiempo el plato se ha ido refinando, y ahora se realiza con caldo de carne y cebolla caramelizada. Todo guisado a fuego lento.
Bourride
Otro de los platos típicos de la Provenza es la bourride, una sopa de pescado cuya receta original viene de Sète, una ciudad de Occitania que cuenta con dos puertos. El nombre de esta sopa significa hervido y al parecer la receta base se remonta a los tiempos en que los fenicios llegaron a Marsella. ¿La base de esta sopa? Rape y alioli, un salsa muy utilizada en Sète.
Poupeton
Ya os hemos hablado de dos sopas típicas de la gastronomía francesa: la boullabaisse y la bourride. El poupeton se prepara con las sobras de esas sopas para conseguir un soufflé. Se machaca el pescado y se mezcla con miga de pan previamente mojada en leche, huevos y queso. Resulta delicioso y es una forma de aprovechar la comida de un plato creando otro igual de sabroso.
Pieds et paquets
Pata y estómago de cordero son los ingredientes principales de este plato típico de Marsella que se cocina con tomates y vino blanco. El estómago se corta para después enrollarlo en paquetes que contienen carne de cerdo, ajo, pimienta y perejil. ¿Para acompañar? Nada mejor que una buena vinagreta.
Escargots
A los franceses les encantan los caracoles, siendo uno de los platos más típicos de la cocina francesa. Dicen que los mejores proceden de Borgoña, pero podéis comerlos deliciosos en Occitania, Bretaña o cualquier otra región francesa. Hay muchas recetas para cocinar los caracoles, siendo una de las más populares una muy sencilla que se prepara con mantequilla, ajo y perejil.
Nada mejor que vino para acompañar estos platos. Para elegir un buen vino dejaros aconsejar por los camareros del restaurante francés en el que vayáis a comer o cenar. Porque no hace falta salir de España para probar comida francesa, tenéis restaurantes de lujo en Madrid, como el Room 1, que fusiona la cocina española y la francesa. Y si os apetece preparar estos platos en casa, seguro que en alguna vinoteca de vuestra ciudad encontráis el vino perfecto.